Actividad V. La educación en 2050

Dicen que el tiempo lo cambia todo...

No estoy segura de ello, pero, ciertamente, las cosas han cambiado mucho desde aquel 2019. Treinta años han pasado desde que se obtuvo la primera imagen de un agujero negro procedente del universo. En realidad, ese acontecimiento era tan sólo la punta del iceberg de lo que se estaba a punto de descubrir. En el año 2031, un grupo de científicos y científicas de diferentes partes del mundo logró confirmar la existencia de los agujeros de gusano y la posibilidad de viajar a otros lugares del espacio exterior, lejos de nuestro Sistema Solar. De hecho, este mismo lunes dará comienzo uno de los viajes espaciales más importantes de la humanidad y la expectación generada es mucho mayor que la que había durante el viaje a la Luna que tuvo lugar hace alrededor de ochenta años.

La ciencia no es la única que ha experimentado cambios. Aunque cueste creerlo, ya no existen las guerras, cada país vive en paz y, lo más fascinante de todo, en una democracia real. Cada país está gobernado por un equipo de hombres y mujeres -elegidos por la mayoría de la población- que toman en consideración las peticiones e inquietudes de sus ciudadanos/as, se preocupan por los problemas que pueden surgir y colaboran en todas las causas que atañen a la seguridad y al bienestar de la ciudadanía. El respeto, la convivencia y la tolerancia reinan entre la humanidad: no hay discriminación, no hay criminalidad y la violencia de género ha desaparecido de la faz de la Tierra.

Seguramente te preguntarás qué ha ocurrido con la educación. Bien, lo primero que debes saber es que no queda ni rastro de acoso escolar: cualquier signo de alerta es tratado inmediatamente antes de que se transforme en una situación peor. Además, cada año se selecciona un país determinado y se realizan intercambios culturales, de modo que, cuando llegan nuevos alumnos/as, se realiza una salida extraescolar con ellos/as en la que juegan y conviven, todo ello para conocerse y, sobre todo, aceptarse. ¿La diferencia de idiomas? No es un problema, pues se ha creado un pequeño dispositivo que se coloca en el oído, de manera que, cuando una persona habla en su idioma, el receptor/a recibe el mensaje traducido al instante. No te preocupes, este tipo de traductor se aleja rotundamente de aquella aplicación obsoleta llamada Google Traductor. 

Como habrás podido deducir, sí, la sociedad está absolutamente rodeada de tecnología y, como no podía ser de otra manera, también ha colonizado las aulas. Eso sí, tienes que saber que no se utiliza sin más, sino que se emplea una metodología adecuada para promover un mayor aprendizaje en el alumnado, un aprendizaje que siempre es experimental y que se ha conseguido, entre otras cosas, gracias a la creación del VirtuCine5D, un dispositivo que combina la Realidad Virtual con el cine en cinco dimensiones. Las obras cinematográficas en tres dimensiones han quedado ancladas en el pasado, ahora es posible recrear cualquier tipo de escenario en el que todo lo que aparece en él se puede tocar y modificar y, además, se pueden percibir olores, sabores y movimientos de todo tipo. Además, ya no es necesario el uso de gafas especiales u objetos que se colocan en el cuerpo, sino que un pequeño proyector sofisticado hace todo el trabajo. De esta forma, es posible convertir el aula en todo tipo de ambientes y espacios relacionados con contenidos de las materias curriculares.

Quizá creas que la tecnología ha devorado completamente los libros en papel, pero, curiosamente, siguen existiendo y, por supuesto, siguen siendo una preferencia por encima de los libros digitales. Pero esto no significa que no hayan cambiado; de hecho, los libros en papel incorporan ahora una opción que sirve para mostrar hologramas a lo largo de la lectura para observar determinadas escenas o elementos concretos. Además, todos y cada uno de ellos traen una adaptación para personas con discapacidad física, visual o auditiva. ¿Y sabes qué? El interés por la lectura ha aumentado fervientemente entre los niños/as; posiblemente, el hecho de eliminar las lecturas obligatorias y dejar que ellos elijan sus propias lecturas desde el principio de su escolarización ha tenido algo que ver.  


Recuerdo que en abril del año 2019 llegó a nuestros oídos la noticia de que iban a censurar el cuento de la Caperucita Roja. Afortunadamente, gracias a un grupo de maestros y maestras concienciados con la importancia y la esencia de la literatura tradicional, las obras clásicas siguen vigentes en la actualidad y, lo más importante de todo, se siguen transmitiendo de generación en generación.


No, definitivamente, el tiempo no lo cambia todo, somos nosotros/as quienes cambiamos las cosas.

Inás Hammoudi Mustapha